Estos serían sus consejos para afrontar de forma positiva el esfuerzo de mantener a los pequeños alejados de los contenidos perjudiciales:
1. Aprenda cómo funcionan los programas de intercambio de archivos de las redes P2P. Si sus hijos quieren utilizarlos, con que tenga uno será suficiente. Pero es conveniente que se familiarice con su funcionamiento. Pruebe a aprender con su hijo.
2. Aleccione a sus hijos para que, antes de buscar archivos en esas redes con el fin de descargarlos, le avisen y le digan qué archivos desean buscar y descargar.
3. Controle que todos los títulos de los archivos que se descargan sean los correspondientes a los archivos buscados. En esos títulos puede detectar a priori archivos nocivos.
4. Previsualice los archivos antes de finalizar la descarga cuando ello sea posible.
5. Compruebe el contenido de cada uno de los archivos que descarguen aunque sean muchos. En cualquiera de ellos puede haber contenido no apropiado.
6. Coloque el ordenador para uso de los menores en un lugar común de la casa, NUNCA en su dormitorio o en habitaciones de uso particular donde puedan utilizar internet sin ser controlados de forma adecuada.
7. Revise adecuadamente la configuración del programa que utilice para descargar archivos y cerciórese de qué carpeta de su ordenador está siendo compartida con otros usuarios de la red. Si no lo hace, puede que esté compartiendo más carpetas y, por tanto, más datos de los que desea sin saberlo.
8. Compruebe frecuentemente el contenido de la carpeta de archivos compartidos para detectar si desde el ordenador utilizado por los menores se están compartiendo archivos de contenido inadecuado.
9. No pierda la oportunidad para dialogar con ellos y explicarles qué archivos son adecuados para que los vean por internet y cuáles no.
10. Recuérdeles que hay que respetar los derechos de autor y la propiedad intelectual. Es otra forma de evitar el acceso a contenidos inadecuados.
Fuente: «Tranki Pap@s»
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