El trastorno o desorden de procesamiento sensorial es una dificultad para procesar e integrar la información sensorial.
¿Qué es la integración sensorial?
Como integración sensorial se entiende a un proceso neurológico que organiza las sensaciones corporales propias y las del medioambiente. Es, a través del procesamiento sensorial, que es posible darle sentido a todas las sensaciones provenientes del propio cuerpo como del exterior. Sin embargo algunos niños no tienen un desarrollo adecuado de este tipo de procesamiento, teniendo dificultades en el nivel de alerta y atención, la autorregulación y la organización de la información.
¿Cómo afecta el trastorno de procesamiento sensorial en el niño?
A menudos (y especialmente en niños pequeños) el trastorno de procesamiento sensorial puede fácilmente confundirse con problemas de conducta ofalta de adaptación del niño pudiendo expresarse erróneamente como ansiedad, depresión, baja autoestima o aislamiento social.
Alrededor del 3% de los niños de todo el mundo tiene este tipo de trastorno.
Según los estudios recientes se ha podido determinar que si bien el trastorno del procesamiento sensorial (TPS) es diferente al trastorno de atención con hiperactividad (TDAH) ambos pueden coexistir en el mismo paciente.
¿Cómo detectar a un niño con trastornos en el procesamiento sensorial?
A partir de los dos años es posible observar ciertos indicios aunque estos pueden ser confusos aún:
- Trastornos en el sueño
- Irritabilidad
- Llanto excesivo
Como se verá estos síntomas son bastante frecuentes en un niño de 2 o 3 años, por lo que debemos aguardar un poco más de tiempo antes de sospechar que el niño tiene TPS.
Sin embargo hay otros síntomas que pueden aparecer y que expresan un posible trastorno en el procesamiento sensorial: dificultades para pedalear o para manipular objetos pequeños, vestirse o treparse.
Comportamientos típicos de un niño con problemas de procesamiento sensorial
- Niño desorganizado
- Presenta dificultades de concentración
- Torpeza (Choca dentro de un ambiente)
- Falta de equilibrio
- Tendencia a tener accidentes
- El niño tiene una actitud temerosa al realizar actividades físicas cotidianas
- Evita ruidos fuertes, olores, determinadas texturas, etc.
Luego de presentarse estos síntomas es imprescindible acudir con un profesional para un diagnóstico ya que, es luego de tener este, que se podrá comenzar una terapia de rehabilitación.
Es importante remarcar que el trastorno del procesamiento sensorial aparece, mayormente, de manera asociada con otros trastornos siendo algunos de los más frecuentes el TDAH y el autismo.
¿Quién realiza la rehabilitación sensorial?
Este tipo de terapias lo realiza un terapista ocupacional. Es el terapista ocupacional el que deberá planificar estrategias acorde a la dificultad de cada niño, por otra parte, si el niño es pequeño, se pueden alcanzar grandes logros.
Por otra parte se trabaja, además, con el entorno del niño; familia y escuela (o jardín de infantes).
© 2018 ¿Qué es el trastorno de procesamiento sensorial? María Eugenia Daney. Escuela de padres.