La selección de ropas de bebés de manera correcta influye decisivamente en el desarrollo infantil, en la capacidad de aprendizaje de los niños pequeños y en su autoestima.
La infancia es una de las etapas más importantes para el desarrollo intelectual de las personas. Muchos expertos consideran que los primeros años de vida son cruciales para que los niños aprendan y se preparen para el futuro. En este periodo primigenio de vida el cerebro funciona como una esponja, de modo que va absorbiendo, imitando y reproduciendo todo tipo de comportamientos y actitudes.
Si vamos a la etapa más inicial de la infancia, cuando los pequeños aún son bebés, uno de los aspectos clave es la elección de la ropa. Las ropas de bebé son una forma más de acercarse al mundo, de establecer contacto con el entorno que les rodea.
En este sentido es importante buscar prendas que vayan más allá de ajustarse a su talla. Las ropas de bebés solo serán convenientes si ofrecen libertad de movimientos y aseguran total comodidad en cuanto a confort término y sensibilidad en la piel.
¿Cómo influye la selección de vestimenta infantil en el desarrollo de los niños?
Hoy en día existen muchas tendencias a la hora de vestir a los pequeños. Hay quien busca lucir ropas de bebés más bonitas, mientras que otras familias se ven más condicionadas por el factor presupuestario.
En cualquier caso, hay que tener muy en cuenta que una buena selección de prendas contribuye a impulsar el aprendizaje de los más pequeños. Además, participa en el desarrollo de habilidades motoras, va ayudando a que los pequeños asimilen su propia personalidad y capacidad de autonomía. Finalmente, incluye en cómo perciben el mundo y cómo utilizan sus sentidos para reconocer los estímulos.
La selección de ropa y las posibilidades de juego
Los bebés necesitan desde que nacen tener contacto directo con el mundo que les rodea. La forma de integrar los estímulos externos varía en función de su edad. Una de las acciones más eficaces para acercarse a ese mundo exterior es a través del movimiento.
Todos los movimientos, ya sean involuntarios o voluntarios, están enfocados en la ejercitación de los músculos y el esqueleto. Acaban llevando a los bebés y niños a asumir nuevas posturas que les permiten conocer mejor el mundo que les rodea.
La pediatra Emmi Pikler fue pionera en los estudios de desarrollo independiente del movimiento del niño. Esta experta proponía no obstaculizar los movimientos espontáneos y libres del niño. También aconsejaba no adelantar ni dirigir sus acciones motrices, sino dejar al niño libertad para experimentar su movimiento natural.
Teniendo este principio de partida, la selección de ropas de bebés ha de buscar que las prendas no supongan un impedimento en su movimiento. Esta idea, que es muy asumida cuando se alcanza la primera infancia, no es tan evidente en la etapa de bebés.
La ropa y el desarrollo sensorial
Otro aspecto en el que participa la selección de ropas para bebés es su desarrollo sensorial. Los niños pequeños aprenden a relacionarse con el mundo a partir de su capacidad sensorial. En la primera etapa de vida, hasta los ocho o nueve meses, el tacto es el sentido más importante.
La ropa con la que decidan los padres vestirlo va a transmitirle a su piel ciertas sensaciones. Esto explica por qué es recomendable que los bebés no usen calzado hasta que no se acerquen al primer año de vida.
La piel, además de ser el órgano más extenso del cuerpo humano, es una estructura muy sensible. A través de ella los bebés conocen el mundo y reciben estímulos externos. Favorecer espacios de confort con la ropa es fundamental en el desarrollo de los bebés.
La afirmación personal y la capacidad de autonomía
A medida que los bebés van creciendo, se convierten en niños y van ganando en autonomía. Esto se puede potenciar si se ofrece libertad de elección. Es decir, si son ellos mismos los que deciden qué ropa usar, ganarán autoestima y capacidad de iniciativa.
Vestirse de manera autónoma es una competencia que se puede adquirir desde los dos años de vida. Una buena selección de vestimenta que sea cómoda en su colocación y retirada anima a los pequeños a ser ellos mismos los que hagan esta tarea.
Las ropas de bebés pueden favorecer el aprendizaje y el desarrollo infantil. Su selección debe estar marcada por la facilidad de movimientos, la accesibilidad sensorial y la posibilidad de jugar con libertad cuando las visten.