¿Sabéis por qué no es bueno levantar un castigo antes de que se cumpla?

levantar un castigo

¿Sabéis por qué no es bueno levantar un castigo antes de que se cumpla?. Los castigos son la parte mas controvertida  de la educación de los niños, y es que pocas veces padre, madre y educadores, llegan a estar de acuerdo en cuanto lo que se debe y no se debe hacer a la hora de los castigos, es probable que en lo único que todos están de acuerdo –  si no es así, debería serlo- es que el castigo físico debe ser eliminado por completo.

Lo que se busca con un castigo, es que los pequeños realmente aprendan algo de él, y no vuelvan a realizar determinada conducta y además que aprendan a hacerse responsable por las cosas que hacen.


¿Levantar un castigo o no?

Una de las grandes dudas que surgen alrededor de los castigos, es si debemos o no levantarlos una vez se han impuesto, y la respuesta rotunda y definitiva es no.

No se trata de que seáis completamente rígidos, sino, que para conseguir que el castigo sea verdaderamente educativo, debéis imponerlo con seriedad, pero si imponéis un castigo y al poco tiempo lo levantáis, entonces el niño se dará cuenta que no es serio y probablemente no aprenderá nada ello.

Levantar un castigo es en realidad una mala idea, pues le estáis enviando mensajes equivocados al pequeño, y eso es algo que no debe suceder.

5 Pautas para que no tengáis que levantar un castigo

Algunas de las razones por las que probablemente pensáis en levantar el castigo que has impuesto, es que sintáis que este ha sido demasiado fuerte, o demasiado largo para la falta que el pequeño ha cometido, es por eso que para que no tengáis que pasar por esa situación, al momento de colocar el castigo, seáis bastante razonable y te toméis las cosas con calma.

  1. Primero que todo debéis tomarte las cosas con calma, cuando el niño haga algo por lo que deba ser castigado, no actúes sin pensar, pues podéis decir cosas hirientes y además podéis colocar un castigo de que después te arrepientas.
  2. Dile al niño el motivo por cual lo vais a castigar, el de tener claras las razones.
  3. Cuando estéis pensando en el castigo que impondréis, debes ser racional, pues el castigo debe ser proporcional a la acción que el niño realizo, y además debe estar relacionado con dicha acción.
  4. Debéis dejar clara la duración del castigo, este punto es muy importante, pues no debéis levantar el castigo, este siempre debe cumplirse.
  5. El castigo debe colocarse cuanto antes, no debéis esperar a que pasen días para imponerlo, pues la relación acción – castigo puede perderse y podéis perder el aprendizaje que este le deje al pequeño.

Es muy importante que coloquéis castigos racionales, relacionados con la acción, que sean cuanto antes, que el pequeño conozca la razón por el que se castigará, y sobre todo, que este castigo no sea levantado para que pueda mostrarse la seriedad y la importancia de que las cosas se hagan bien, de esa forma el pequeño entenderá que todo lo que hace tiene consecuencias.


El castigo educativo y sus 5 errores que debéis saber

  1. En primer lugar están los castigos sin medida proporción. Muchos padres le dicen a sus hijos que no podrán hacer lo que les gusta durante una semana –por ejemplo- pero en realidad es que es mucho tiempo y que finalmente el castigo no se cumplirá a cabalidad.

Debéis recordar que un castigo educativo debe ser lógico, pero además debe ser proporcional a la mala acción o al hecho que cometió mal.

  1. En segundo lugar está el dejar el castigo para después. Debéis tener muy claro que los castigos deben aplicarse de forma inmediata a la realización del hecho, de poco o nada servirá que dejéis pasar un tiempo para ponerlo en marcha.
  1. También tenemos los castigos que no llegan a cumplirse por completo con la excusa de que se ha portado bien. Levantar el castigo le transmitirá al niño información errónea acerca de la finalidad del castigo, es decir, pensara que si hace algo mal lo castigaran, pero si se porta un poco bien durante el castigo este va a ser levantado, entonces en realidad, no habrá consecuencias mayores para lo que hizo.
  2. Muchas veces los padres tienen un estado de tensión o estrés a causa de cosas externas como el trabajo o las cuentas por pagar y en determinado momento el niño comete un error –por mínimo que sea- y el padre lo grita y lo castiga. Si castigamos al pequeño a causa de un enfado tuyo no estaréis enseñándole nada bueno, solo que lo castigan a causa de tu estrés, y el comenzará a replicar ese comportamiento, cuando este enojado se desquitará con sus compañeros de clase o sus juguetes.
  1. Finalmente está el famoso “te dejo sin…” debéis ser consiente que hoy en día los niños tienen una gran actividades y objetos a los que recurrir, entonces si le quitáis algo, simplemente buscara otra actividad que hacer u otro muñeco con que jugar. Entonces, para que un castigo de este tipo sea verdaderamente efectivo, se debe suspender o privar al pequeño de algo que verdaderamente no pueda reemplazar, de esa forma pensara dos veces antes de hacer algo mal.


¿Se debe castigar para motivar a los pequeños?

Sin lugar a dudas, es de vital importancia que los pequeños aprendan  que las cosas que hacen  tienen consecuencias –buenas o malas- pues esto es algo que sucede de forma completamente normal a lo largo de toda nuestra vida, entonces en cierta medida, es bueno que usemos castigos para motivar a vuestros hijos para hacer las cosas de la forma correcta.

Sin embargo es muy importante que desde el principio tengáis en cuenta que estos castigos no pueden ser perjudiciales de ninguna manera, ni física, ni psicológicamente.

Entonces debéis entender y hacerle entender al pequeño que el castigo no es una forma de que este se sienta mal, sino, que es una consecuencia de vuestros actos. Los pequeños deben saber de forma clara el porqué de los castigos y las consecuencias de vuestras acciones.

Castigar para motivar: 7 pautas para que lo hagáis correctamente

  1. En primer lugar los castigos que coloquéis a vuestros hijos deben ser consecuentes con su conducta.
  1. Es importante que los castigos sean consensuados con el pequeño, lo que lograreis llegando a acuerdos es que se haga responsable de su conducta y además se involucre mejor con el castigo, así que en realidad estará reflexionando sobre lo que hizo.
  1. Nunca, bajo ningún motivo el castigo puede ser humillante o dañino, ni física, ni psicológicamente.
  1. No hagáis que los castigos sean materiales, pues no lo estaréis invitando a reflexionar, sino que simplemente no podrá conseguir algo material.
  1. Debéis colocar un castigo directamente relacionado con la acción, entonces, por ejemplo, si no quiso tomarse la sopa, el castigo puede ser no comer el postre.
  1. No levantéis los castigos a mitad de estos, debéis ser consecuente con tus palabras y bajo ningún motivo cambia de opinión a mitad de camino.
  1. Después de terminar el castigo podéis hablar con él acerca de la lección aprendida y reforzar el castigo motivándolo a hacer las cosas bien, mostrándole que para los buenos actos hay buenas consecuencias y para los malos las consecuencias no son tan buenas.

Es importante que recordéis siempre que debéis pensar bien cada castigo, no reacciones con mala actitud frente a sus actos, debéis ser razonable, y os recomiendo preguntarle porque hizo lo que hizo, llevarlo a un punto reflexivo, mostrándole siempre que vuestro interés principal es que haga las cosas bien y que estáis ahí para acompañarlo y apoyarlo siempre que os necesite.

Espero que estos siete consejos acerca de cómo manejar los castigar para motivar a ser y actuar de una mejor manera os sean de gran ayuda y consigáis implementaros de la forma correcta.

© 2018 Escuela en la nube ¿Por qué no es bueno levantar un castigo antes de que se cumpla?. Escuela de padres.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.