A todo padre le preocupa la educación y la formación que reciba su hijo durante toda su vida, ya que de esto dependerá su desempeño en la vida adulta. Así, es sabido que la educación, cuanto más completa, variada y realizada desde una mirada afectivo-pedagógica, es más efectiva en el corto, mediano y largo plazo.
Esto es lo que sucede con la pedagogía Montessori que no solo abarca las camas Montessori, sino también muebles, aspectos de la escuela y de la vida en general.
En las próximas líneas, veremos cuáles son los beneficios y las ventajas de las camas Montessori.
6 Beneficios de las camas Montessori
- Desarrolla la independencia del niño. Desde que los niños cumplen 1 año aproximadamente, es posible que ellos se acostumbren rápidamente a estas camas. No obstante, es posible comenzar a usar las camas Montessori desde el cuarto mes de vida, es decir desde el momento en que el niño/niña comienza a gatear. Por otro lado, lo que provee de independencia con este tipo de camas es que poseen una altura ideal para los más pequeños. Lo mejor es comenzar colocando un colchón en el suelo y después adquirir una de estas camas, por lo que será muy sencillo para ellos subir y bajar de la misma sin ayuda de sus padres o adultos responsables.
- Favorece la lectura y diversas actividades de interés para el niño. Colocar cerca de la cama Montessori libros, juegos de mesa, revistas, un vaso de agua, etc le permitirá al niño acceder a lo que quiera sin necesidad de pedírselo a los padres. Incluso, cuando sea de noche, si se despierta y encuentra juguetes con los que jugar o libros, revistas o cualquier otro objeto que le provea confianza y seguridad, es posible que los niños se sientan mucho más seguros y se promueva, de esta forma, una vez más la autonomía y la autosuficiencia.
- Es una forma paulatina y segura de pasar de la cuna a la cama. En muchos casos, cuando los niños dejan la cuna, les produce inseguridad y miedo, puesto que este ha sido (desde su concepción) su lugar, su espacio durante toda su vida. Al cambiarles el lugar, pueden sentirse incómodos. Incluso es normal que las primeras noches los niños que dejan la cuna, no duerman del todo cómodos. Esto no ocurre con las camas Montessori ya que el paso de una cuna a estas camas y la altura que poseen permiten al niño moverse con libertad y bajarse de la misma cuando así lo deseen.
- Fomentan el aprendizaje. Al poseer movimiento, poder subir o bajar de la cama cuantas veces quieran, permiten que los niños se encuentren con mucha más libertad. Esto favorece las estructuras neuronales en crecimiento y desarrollo que se ven fuertemente beneficiadas por el mismo movimiento y exploración de los niños, favoreciendo así la interconexión neuronal y permitiendo un aprendizaje más fluido y veloz.
- Son seguras. Debido a que estas camas poseen una altura prácticamente a la altura del suelo, esto permite que los niños no tengan accidentes domésticos cayéndose de las mismas, sea de día o bien mientras duermen de noche.
- Son camas que poseen diferentes alturas. Tal como hemos dicho más arriba, estas camas se pueden usar desde el cuarto mes de vida del bebé o desde que él comienza a gatear. No obstante, las camas Montessori deben ajustarse al crecimiento y etapa de cada niño, por lo que podrás encontrar camas de diferentes alturas, diseños y estilos que acompañarán el crecimiento físico y psíquico de tus hijos.